El Secretario General de la Organización destacó que muchas naciones «ignoraron» sus recomendaciones y que se pagó «un alto precio».
Las diferencias entre la Organización Mundial de la Salud y las naciones que no tomaron medidas estrictas cada vez se hacen más amplias. Desde que Estados Unidos decidió retirar su apoyo, las críticas cruzadas aumentaron y la OMS fue quien disparó hacia los jefes de Estado.
«Hemos visto expresiones de solidaridad, pero muy poca unidad en nuestra respuesta a la COVID-19. Los países siguieron estrategias divergentes y todos pagamos un alto precio por ello», señaló el Secretario General de la OMS.
«Muchos países ignoraron las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud», agregó Antonio Guterres.