El jefe de Gabinete de la Provincia de Buenos Aires criticó a la ex diputada por la fiesta de cumpleaños en su casa y resaltó que «estaba prohibido» realizar ese tipo de reuniones.
Ante el escándalo de la foto del Olivosgate, el gobierno decidió apuntar todos los cañones contra el cumpleaños organizado por Elisa Carrió. Lilita realizó una fiesta para 70 personas en diciembre, pese a que no se podía y Carlos Bianco marcó que debe «pedir perdón».
«Escuché alguna declaración de Carrió que decía que se sentía muy triste y que por primera vez pensó en irse del país. Lo que me permito decirle es que no hace falta irse del país; solo alcanza con pedir perdón, arrepentirse como ha hecho nuestro Presidente», disparó el jefe de Gabinete de la Provincia de Buenos Aires.
Asimismo, el funcionario le contestó directamente a la ex diputada, quien había arfirmado que había pedido permiso para realizar esta fiesta: «Estaba prohibido en ese momento en la provincia de Buenos Aires hacer cualquier tipo de reunión de tipo cultural, social, recreativo, lúdico, de más de 20 personas».
«Carrió declaró que había solicitado permiso al intendente de Exaltación de la Cruz, quien dijo haber permitido una fiesta íntima. Esto no fue así y, por lo tanto, se infringió la normativa», destacó Bianco en conferencia de prensa.
Además, apuntó que «hubo otras violaciones de la normativa provincial por parte de referentes de Juntos por el Cambio. La ex gobernadora María Eugenia Vidal tuvo el 17 de junio una reunión donde se contagió» a otras personas. «Estaba vigente el decreto donde se establecían prohibidos encuentros públicos y privados, por lo cual está denunciada penalmente», cerró.
