Según la directora nacional de Migraciones, es necesario bajar la posibilidad de que ingresen las nuevas cepas mientras se avanza con la inmunización.
Tras la polémica decisión del gobierno de limitar solo a 600 las personas que pueden ingresar por día a la Argentina, desde Migraciones expusieron los argumentos que los llevaron a tomar esa decisión y remarcaron que un «40% de la gente que no hace el aislamiento».
Florencia Carginano aseguró que «en el actual contexto epidemiológico, el riesgo de introducción de nuevas variantes, aún más transmisibles, podría generar un aumento brusco y elevado de casos, lo que llevaría indefectiblemente a una mayor mortalidad».
«Lo que nos lleva a tomar estas decisiones es que epidemiología nos dice que India es el primer lugar donde circula la variante, el segundo Gran Bretaña y el tercero Estados Unidos y nosotros con Europa y Estados Unidos tenemos la mayor cantidad de vuelos», complementó.
Además, sostuvo en C5N que «en este momento clave de vacunación, en el que estamos abriendo actividades y privilegiando que los chicos vayan al colegio, el restaurante abra y las fábricas trabajen, hay que ajustar en alguna variable y la que toca es la aéreo-comercial, porque es donde puede entrar la variante Delta».
«El ingreso de la variante Delta podría arruinar todo un proceso de vacunación», sentenció y por ello remarcó que «los que fueron de vacaciones van a tener que volver lamentablemente un poquito más tarde, pero es preferible a que tengamos que suspender las clases por un brote».