El ministro de Salud marcó que se necesitará «mucho esfuerzo y voluntad» para llevar adelante la ley sancionada en el Congreso.
Una vez aprobada la Ley de la Interrupción Voluntaria del Embarazo, Ginés González García se refirió a sus sensaciones y reconoció que “estoy contento». El ministro de Salud fue un fuerte militante de la despenalización del aborto no solo en los últimos años, sino desde su primer ciclo en 2003.
«Es un enorme paso. No deja uno de sentirlo en el sentido afectivo pero no sólo estoy contento por el debate, que fue obviamente con los mismos argumentos, sino que fue mucho más tranquilo, fue un de mas democrático. Por la calle, que lo que vi yo, fue con otra madurez. También por las consecuencias de esto y naturalmente porque me parece que la evolución de la sociedad es permanente. Esto tiene ya muchos años”, marcó.
Al aire de Radio Con Vos, sin embargo, reconoció que “tenemos por delante un gran desafío. Esto no va ser fácil de aplicar porque por lo que pasó con lo que ya está aprobado, que es la interrupción legal, que tiene incluso hasta fallos de la Corte. No es lo mismo la aplicación en cada lugar del país. Ahora hay que meterle mucho, mucho esfuerzo y voluntad”.
“Todos vamos cambiando y así maduran y evolucionan las sociedades. No hay que tomarlo como ningún triunfo de un grupo o de otro sino que es una mejora colectiva que obviamente es optativa y va ser de acceso social y gratuito vamos eliminar las tragedias que acompañan esta circunstancia», complementó.
Por último, además, marcó que «en los últimos años ha habido una innovación tecnológica tremenda y se resuelve incluso ambulatoriamente. Esto elimina muchas de las cosas feas que tenía esto. Eran muertes evitables. Me dolían muchas de ellas”.