El jefe de Gobierno Porteño criticó la actitud de Máximo Kirchner, aseguró que lo que hizo «no ayuda» y marcó que todavía no tiene una postura tomada sobre el acuerdo con el Fondo.
Horacio Rodríguez Larreta habló de la renuncia de Máximo Kirchner y criticó las internas que se están dando en el espacio oficialista tras el arreglo con el FMI. El jefe de Gobierno Porteño marcó que “justo cuando necesitamos tener una visión de largo plazo, situaciones como esta generan más confusión. Es inoportuno, no ayuda”.
Según Larreta, todo este tipo de internas dentro del Frente de Todos “generan incertidumbre que en este momento tan crítico de la Argentina no ayuda para nada”.
No obstante, no quiso meterse y aseveró que “los problemas internos son temas del oficialismo», pero disparó que «para el país es grave que muestren contradicciones e idas y vueltas en algo tan crítico como la relación y el acuerdo con el FMI”.
“El problema de la Argentina no es la renuncia de un jefe de bloque es que no tenemos una visión, un rumbo, un plan claro sobre cómo vamos a crecer”, agregó en conferencia de prensa y volvió a resaltar que “Argentina necesita un plan de largo plazo, cómo aumentar y generar empleo, cómo se invierte, cómo aumentar las exportaciones; con situaciones como esta vamos para atrás”.
En cuanto a la postura sobre el acuerdo que se alcanzó, Larreta dijo que “todavía no tenemos los detalles, la letra chica del proyecto, con lo cual difícil es tomar una posición, pero lo vamos a ir conversando y vamos a tener una posición unificada”.
Por último dijo que la marcha contra la Corte Suprema fue de una “altísima gravedad institucional y más grave es que el Gobierno la impulsa, participa, incluso hubo funcionarios yendo a la marcha”.