El jefe de Estado pidió una nueva distribución de los ingresos a nivel Mundial y marcó que es necesario interceder por la paz entre Rusia y Ucrania.
Alberto Fernández realizó hoy su primera exposición ante el G7. El Presidente está en calidad de invitado y, desde allí, marcó como fundamental que en el mundo haya una «nueva arquitectura financiera internacional que incluya a las periferias del Mundo».
Fernández hizo hincapié en forma en la que se distribuye el dinero a nivel mundial y marcó que es importante que “los esfuerzos se equilibren y las ventajas se distribuyan con criterios de equidad. Soñamos con no ser discriminados por el mundo central y condenados a la marginalidad y al olvido”.
En ese sentido y, al igual que lo hizo las otras veces, solicitó que el Fondo Monetario Internacional revise su política de sobretasas. Según Alberto, “constituyen una penalización inadmisible en las circunstancias dramáticas que hoy vivimos”.
El jefe de Estado también dio su visión de lo que sucede entre Rusia y Ucrania y disparó que “La Argentina condenó la invasión» y pidió que haya «pleno apego a todos los principios del multilateralismo». Fernández agregó que en la Argentina «creemos en la solución pacífica de las controversias y en el pleno respeto de los derechos humanos”.
“Desde un comienzo reclamamos el cese de las hostilidades. Ahora necesitamos impulsar el diálogo entre las partes involucradas. La historia da cuenta de que cada conflicto terminó, con acuerdos logrados sobre la base de iniciativas concretas”, complementó.
Además aseveró que “el mundo entero, y no exclusivamente Europa, precisa una paz duradera, resistente y sólida” y aseveró que “los flujos comerciales y la logística, ya seriamente dañados durante la pandemia, llegaron a un punto crítico. La guerra promueve el gasto en armamentos en detrimento de la inversión en proteínas, salud o educación que tanto necesita la humanidad”.